martes, 22 de julio de 2008
winner winner chicken dinner
21: Blackjack aborda un tema que puedo resumir de este modo: las matemáticas al servicio de la estafa.
Un grupo de esforzados alumnos del MIT comandados por un profesor de probabilidades resuelven, basándose en el conteo mental de cartas del black jack, esquilmar algunos casinos de las Vegas.
De la proverbial basura veraniega rescato este título. Inspirado en un caso real y pese a que palmo a palmo podemos anticiparnos a lo que ocurrirá en la historia, no es una película aburrida.
Todo conspiraba contra esta producción: Un director impresentable, un joven reparto... pero la cinta tiene un as en la manga: Kevin Spacey.
Y aquí es a donde quería llegar. Si a algún actor contemporaneo disfruto enteramente es a Spacey. Me parece impostergable revisar cualquier film que lo incluya en sus créditos. Es el mejor. (Y esto no lo escribo obnubilido por el parecido físico que algunos de mis amigos determinan entre el actor y yo. Las semejanzas mayores que guardo con Spacey van por otro cause.)Los detractores del dos veces ganador del Oscar argumentan que Kevin suele repetirse. Lo cual lleva razón, pues los papeles que elige son casi siempre los de tipos inteligentes, cínicos e incluso majaderos. Pues sí, Kevin siempre es Kevin.. ¿y qué?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
he aquí que también disfruto enormemente a spacey, que actorazo tan convincente. aunque el argumento de esa producción no se me antoja, habrá que caer en el lugar común no'mas pa no dejar de apreciar el caracter histriónico del aludido.
ya le agarró la onda al blog, felicidades mai.
un abrazo de bienvenida!
Publicar un comentario