lunes, 28 de febrero de 2011

Umberto Eco presenta El cementerio de Praga

El cementerio de Praga, la más reciente novela de Umberto Eco, será la obra que discutiremos en el Círculo de Lectores en el mes de marzo. Sirva el siguiente video, donde Eco refiere consideraciones de su trabajo, para ir afilando los aceros.

jueves, 24 de febrero de 2011

Borges, anarquista



Si bien creía que la política era una variante del tedio, Borges se pronunció anarquista, a la manera de Spencer; gesto con el que honraba la memoria de su padre. Reproduzco un diálogo contenido en el libro Anecdotario completo, de Mario Paoletti:

—¿Qué tipo de Estado desearía?

—Un Estado mínimo, que no se notara.Viví en Suiza cinco años y allí nadie sabía cómo se llama el presidente.

—La abolición del Estado que usted propone tiene mucho que ver con el anarquismo.

—Sí, exacto, con el anarquismo de Spencer, por ejemplo. Pero no sé si somos lo bastante civilizados para llegar a eso.

—¿Piensa seriamente que tal Estado es factible?

—Por supuesto. Eso sí, es cuestión de esperar doscientos o trescientos años.

—¿Y mientras tanto?

—Mientras tanto, jodernos.

lunes, 21 de febrero de 2011

La licencia de AMLO

Detrás de la “licencia temporal” de AMLO se esconde el caudillo dando patadas de ahogado para presionar e imposibilitar una futura alianza entre el PAN y el PRD en la carrera por la gubernatura del Estado de México. AMLO, “el salvador de la patria”, teme someter a escrutinio entre los mexiquenses la posibilidad de alianza y es que si el resultado indica que el pueblo la solicita, él tendría que honrar ese reclamo y eso, claro, es contrario a sus intereses. Ya lo sabemos, el pueblo manda, siempre y cuando el pueblo mande lo que AMLO quiere que mande.

Aquí se puede leer, completo, un interesante texto sobre este asunto. Reproduzco un fragmento:

Ningún partido en el mundo puede aceptar que un dirigente pida permiso para separarse, golpear al proyecto y luego regresar como si nada o, más patético aun, como salvador de los principios y la ideología de la agrupación. El cinismo y la desvergüenza son proverbiales.

Si Cuauhtémoc Cárdenas tuvo la visión y el talento para unir a muy diversas izquierdas, Andrés Manuel López Obrador camina en sentido contrario y se ha vuelto en el principal promotor de la división y el encono entre prerredistas. Es verdad que ayudando al PRI se puede asegurar la salida del PAN de la presidencia tras 12 años decepcionantes, pero lo fundamental debería ser construir un escenario en el que la izquierda tenga posibilidad de ganar la elección presidencial. Ojalá que AMLO lo entendiera, pero todo indica que el único interés que lo mueve es el de convertirse, en algún aciago momento de la república, en redentor de la patria, al más puro estilo Santa Anna. Y así, más que factor de cambio, el tabasqueño se ha vuelto un lastre para el estancado y pospuesto cambio democrático

lunes, 14 de febrero de 2011

Al Qaeda & Zetas



1.-Se filtró a los medios, en una comparecencia de la Secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Janet Napolitano, su preocupación por una eventual alianza entre Al Qaeda y los Zetas.

2.- El Secretario de Gobernación, Francisco Blake, se pronunció al respecto dejando las palabras de Napolitano en calidad de rumor.

3.- En su novela Santa Evita, Tomás Eloy Martínez, desliza el comentario: “El rumor… es la precaución que toman los hechos antes de convertirse en verdad.”

viernes, 11 de febrero de 2011

miércoles, 9 de febrero de 2011

El caso Aristegui



En su editorial para Milenio, el día de hoy, Héctor Aguilar Camín repasa el caso Aristegui:

…El fin de semana circuló la noticia de que la empresa Multivisión había terminado su contrato con Carmen, conductora del noticiario matutino más escuchado de la radio.

La empresa señaló como causa que la periodista faltó al código de ética de sus noticiarios, dando como noticia un rumor. Sólo que el rumor era que el presidente Calderón es un borracho, según la manta puesta en la Cámara de Diputados por un grupo del PT.

Carmen dio en parte por bueno el rumor al pedir que la oficina de la Presidencia aclarara, de manera formal y oficial, si el Presidente tenía un problema de alcoholismo, pues era un tema presente en las redes sociales, y de la mayor consecuencia para la vida pública.

Según su propia versión, la empresa habría pedido a Carmen disculparse, ésta se habría negado, a consecuencia de lo cual le fue rescindido el contrato. Consumado el hecho, surgió la versión de que la empresa había procedido así por petición del gobierno de la República.

Pocos creen que la empresa procedió por sí misma. Muchos creen que lo hizo por instrucción presidencial, pero nadie sabe de cierto qué sucedió ni puede aportar una versión estricta distinta de la que ha dado la empresa.


Y, con la claridad que le caracteriza, reflexiona:

Si la empresa procedió por instrucción, petición, sugerencia o inducción presidencial, tenemos un caso de censura inaceptable.

Si la empresa procedió por su propia decisión, sin que mediara presión política alguna, por así convenir a sus convicciones o a sus intereses, estamos ante un caso de cancelación de servicios profesionales.

En el primer caso hay un atentado a la libertad de expresión. En el segundo, el fin de un contrato.

Lo primero es intolerable y debería mover la protesta absoluta y unitaria del gremio. Lo segundo son gajes del oficio, un oficio cuya credibilidad se sustenta, por desgracia, en herir susceptibilidades y tocar intereses.


Finalmente, llama mi atención que la aclaración del asunto la pidió, Aristegui, a la Presidencia y no a los diputados del PT, autores del rumor. ¿Qué acaso no es la parte acusadora la que debe presentar las pruebas?

martes, 1 de febrero de 2011

La Llorona



Sorprende enterarse de los orígenes del mito de La Llorona, no se remontan a la Chihuacóatl azteca (imagen superior) sino a un más allá de la historia de Occidente, donde se rozan Medea y Melusina, según lo documenta Guillermo Sheridan:

La señora Llorona es tan famosa que más vale la pena recordar su origen. Desde luego, la versión folklórica se reduce a que una mujer que mató a sus hijos y en las noches, arrepentida, los busca soltando alaridos. La versión culta diría que esa Llorona emula a una vetusta diosa prehispánica, Cihuacóatl, que poco antes de la conquista presintió que algo horrible iba a acontecer, por lo que comenzó a aparecerse en las noches lanzando gritos espeluznantes y lamentos premonitorios por el atroz destino que aguardaba a sus pobres hijitos mexicas.

De acuerdo con las crónicas (explicadas por Miguel León-Portilla), Moctezuma pensó que los gritos avisaban el retorno de Quetzalcóatl. Pidió su opinión a los sacerdotes que contestaron que los gritos aquellos advertían que, en resumen, el imperio sería destruido por un “misterio” que vendría de lejos. Al plenipotenciario Moctezuma le cayó tan gorda esta profecía que ordenó matar a las esposas e hijitos de los sacerdotes. Al ver lo ocurrido, esos sacerdotes gritaron, claro, “¡Ay, mis hijos!”. Hay alguna versión chicana en el sentido de que, como Moctezuma también dispuso que los sacerdotes fueran desprovistos de sus genitales, de hecho se convirtieron en “lloronas”.
Qué barbaridad.

Por otro lado, es curioso el deseo de convertir en un asunto rigurosamente nacional una representación colectiva que, desde luego, carece de fronteras. Hay “lloronas” en todas las mitologías del mundo: la pobre Medea, que mató a sus hijos en venganza contra su padre malvado, las “banshee” celtas que berrean por las noches, el Hada-Serpiente japonesa, y el paradigma occidental, la malhadada Melusina cuyo esposo, rompiendo el pacto que le prohibía verla los sábados, descubre que es una sirena, lo que la condena a vagar por las noches chillando porque no puede ver a sus hijos… (de hecho, la llorona Cihuacóatl, cuyo nombre significa “mujer serpiente”, es una versión mexica de la “sirena” y de su grito, tan horrible que se hizo propiedad de las ambulancias histéricas del mundo). Manifestación final de la pérdida del amor, de la maternidad, de la vida misma, el grito de la sirena es el más doloroso y triste: el canto que viene de un amor y de una muerte que están más allá de toda comprensión.

Y sin embargo el de las sirenas es un “grito” que también puede domesticarse: hay un puñado de mujeres cantantes (y no sólo de bel canto: Edith Piaf, por ejemplo, o Amalia Rodrigues) cuyas voces extrañísimas se modulan en un canto tan “maravilloso y doloroso que mueve a todos a la piedad”, como escribe Jean d’Arras al describir el grito de Melusina. Hay momentos en que la mexicana Chavela Vargas consiguió, sin duda, ese rango. Y hay algunos que entienden por qué el famoso negro que se precia de ser “como el chile verde” le pide a su “Llorona” que lo lleve “al río”, sede natural de sirenas y ondinas, anfibias embajadoras del amor que trae incluida la muerte.