miércoles, 30 de diciembre de 2009

Pantanos de Centla



Pasada la navidad, en compañía de Mamá, Lorena y Rubén visité Pantanos de Centla. Tomamos la carretera que va de Villahermosa a Frontera; rebasados unos 80 kilomentros alcanzamos la, por el volumen de su descarga, cuenca hídrológica más importante de mesoamérica. Esos humedales, filtro natural de las aguas dulces que van al mar, que en esencia toman parte del municipio que les da nombre, más algo de Jonuta y Macuspana, abarcan poco más del 12% del territorio tabasqueño y por su incuestionable importancia en 1992 fueron declarados Reserva de la Biósfera.

De suave belleza resultaron los dos o tres canales que recorrimos en lancha e imponente, esa es la palabra, la bifurcación conocida por los lugareños como 3 brazos; el punto donde confluyen los ríos San Pedro, Grijalva y Usumacinta.

Cualquier amante de la flora y fauna tendrá un festín: abundan reptiles de la región como la iguana y el garrobo; quelonios sin los cuales tabasco no se entiende: pochitoques, hicoteas, guaos; diversas garzas y cormoranes (el pato buzo de nosotros los chocos) y mucho más. Mi ignorancia en la materia acorta este párrafo.

En esa abundancia que se antoja infinita no es difícil ser feliz; sin embargo, por razones que atribuyo a mi salvaje corazón pensé en como el amor a un mismo tiempo golpea y acaricia; recordé unos versos de Gorostiza que desde hace años me acompañan. Cito de memoria:

Tiene el amor feroces galgos morados
pero también sus mieses
también sus pájaros

martes, 29 de diciembre de 2009

Borges, Ortega, Reyes



Alfonso Reyes es un autor que se cita mucho y se lee poco. La vastedad de su obra suele intimidar: lo mismo sus cuestiones gongorinas que sus estudios helénicos;sólo por citar un par de asuntos hoy mirados con desdén.

Se ha presentido, para acercarse a Reyes amerita una brújula. Consiente de ello, y en conmemoración de su 50 aniversario luctuoso, acaecido el pasado 27 de diciembre, Letras Libres, en su número reciente, convocó a un grupo de lectores del regiomontano para arrojar la primer piedra de lo que podría terminar siendo un diccionario alfonsino.

Comparto ahora algo de la entrada “Ortega y Gasett” preparada por Adolfo Castañón. En 1927, con 43 años de edad, Reyes llega a Buenos Aires, allí “trabará con un selecto grupo de escritores y artistas entre los que sobresale su amigo impar, el entonces joven Jorge Luis Borges (28 años)”. Por aquellos años, invitado por Victoria Ocampo, José Ortega y Gasset visita la capital Argentina; un ensayo del español lo malquistará con el mexicano. Así lo recuerda Borges:

(Reyes) estaba indignado por un juicio más o menos ligero y atolondrado de Ortega y Gasset sobre Goethe. Goethe era uno de los dioses de la vocación de Alfonso Reyes. Entonces formuló varias objeciones y yo le dije que por qué no las escribía. Y entonces él, con genuino estupor me dijo: “Pero cómo yo voy a polemizar con Ortega y Gasset”. Yo le dije: “Pero todos sabemos que usted es infinitamente superior a Ortega y Gasset”.

Esa tímida actitud obedecía a cierta cortesía del mexicano que lo llevaba, a decir de Borges, a ponerse “en actitud de discípulo ante escritores que eran ciertamente inferiores a él”. Borges, sus lectores lo sabemos, cultivaría esos modales. Entre la gritería que hoy nos ensordece no vendría mal rescatar aquella herencia de Reyes.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Habré vivido como un dios



Because nobody sends me flowers anymore, me autorregalé la portentosa compilación de la obra poética de Marco Antonio Montes de Oca, sus trabajos de 1953 a 2000, Delante de la luz cantan los pájaros.

La poesía reunida de Montes de Oca la abre el canto A las Parcas de Hölderlin que ya anuncia lo que se avecina; reproduzco los versos fianales:

…pero si un día alcanzó lo sagrado, aquello
que es caro a mi corazón, el poema,

bienvenido entonces, oh silencio del reino de las
sombras.
Contento estaré, aunque mi lira
allí no me acompañe, por una vez
habré vivido como un dios, y más no hace falta

viernes, 11 de diciembre de 2009

Emilio, los chistes y la muerte



El poeta Fabio Morábito lanza su primer novela, Emilio, los chistes y la muerte. La sinopsis de ese trabajo se puede leer aqui. Podríamos hablar de los orígenes y hábitos de Morábito pero él nos ahorró la tarea:
...Yo nací en una playa
de África, mis padres
me llevaron al norte,
a una ciudad febril,
hoy vivo en las montañas,
me acostumbré a la altura
y no escribo en mi lengua,
en ciertos días del año
me dan vértigos y mareos,
me vuelve la llanura,
parto hacia el mar que puedo,
llevo libros que no
leo, que nunca abrí,
los pájaros escriben
historias más sutiles...


Del debut como novelista de este austero poeta me ocuparé en la primer sesión del Círculo de Lectores de 2010, en enero próximo.
***

Por qué Saramago, No. Sheridan expone aquí sus razones.

lunes, 7 de diciembre de 2009

El adúltero

Era la reunión de fin de año, en el domicilio del matrimonio Hinojosa - Deándar, el notario Albino Salinas preguntó sobre el autor, de los leídos en el año en el Círculo, del que guardaba particularmente recuerdo.

No medité tanto la respuesta y conferí a mi comentario un aire de naturalidad. Onetti, sin duda. El centenario del uruguayo fue un buen pretexto para revisitar su obra. En mi memoria no se apaga la miseria de sus personajes cariacontecidos y terribles. De manera que no olvido ese estilo seco, casi cruel, pero altamente literario.

Entre las actividades que Mario Vargas Llosa desplegó en la pasada FIL de Guadalajara se cuenta la presentación de El viaje a la ficción. El ensayo donde el peruano aborda la vida y obra del creador de Santa María. En esa ocasión Vargas Llosa recordó las circunstacias en las que coincidió con Onetti en San Francisco. Aquella vez hablaron de sus partìculares hábitos de escritura; mientras que el primero se autoimpone el ejercicio de escribir todos los días; el segundo sólo lo hacìa cuando se sentía impelido; Onetti expresó tal diferencia en estos términos: Mario estaba casado con la literatura; él, en cambio, mantenía con ella relaciones adúlteras.

***
Intercambios: Se lo leí a Catón: "Los mexicanos decimos "gis", vocablo de origen español, vía el latín; y en España se dice "tiza", palabra mexicana con raíz del náhuatl".

martes, 1 de diciembre de 2009

A ciegas



Sobre Los abrazos rotos se ha vertido mucha tinta, Almodóvar el que más. Rescato aqui la novedad de una canción, con música del tándem del manchego, Alberto Iglesias, interpretada por Miguel Poveda, se llama A ciegas y en ella se escuchan coplas asi:

No tienes que darme cuenta
A ciegas yo te he creido
Yo voy por el mundo a tientas
desde que te he conocido

LLevo una venda en los ojos
como pintan a la Fe
no hay dolor como esta gloria
de estar queriendo sin ver

Yo me clavara en los ojos
alfileres de cristal
pa no verme cara a cara
contigo y con tu verdad